En la Alta Guajira el 97.7% de las comunidades Wayúu consume agua de fuentes contaminadas y solo tienen acceso a 0.7 litros de agua para el consumo diario, las consecuencias del cambio climático como las sequías en las zona además del confinamiento obligatorio le ha impedido a esta comunidad indígena poder acceder al recurso hídrico esencial y alimentarse de manera apropiada.

En Boyacá casi el 61% de los niños y jóvenes rurales se encuentra en condición de pobreza sumándole que solo 15 de los 123 municipios del departamento cuentan con agua apta para el consumo humano. La pandemia ha afectado la disponibilidad de alimentos en varias veredas del departamento, afectando la seguridad alimentaria de su población. La imposibilidad de trabajar por el confinamiento obligatorio ha hecho que actualmente muchos niños, jóvenes y mujeres rurales pasen hambre en el departamento de Boyacá.

Con esta campaña beneficiaremos a más de 800 personas pertenecientes a las rancherías de Perrisou y Topia en la Alta Guajira y 7 veredas de Toca, Boyacá.